domingo, 31 de mayo de 2009

Los celos en la pareja




Celos normales, hasta cierto punto

Los celos son difíciles de definir ya que pueden indicar temor a perder el amor de una persona o significar que se considera al otro como una posesión y que se tiene todos los derechos sobre él.
Cuando los celos son causados por el miedo a perder el amor pueden ser normales y si son moderados incluso ayudan a incentivar el interés por la pareja.


Los celos que mejoran la pareja

Un hombre o una mujer que sientan celos al pensar que su pareja es deseable para otras personas seguramente no descuidarán su apariencia personal y tratarán de seducirla continuamente pensando en que siempre habrá una especie de competencia con rivales reales o imaginarios.
En ese caso los celos pueden ser sanos y beneficiosos porque evitarán que la pareja caiga en la momotonía y el aburrimiento.

Los celos enfermizos

Los celos enfermizos son aquellos que se vuelven obsesivos, la persona que padece ese tipo de celos vive sospechando de su pareja, está segura de que le es infiel, vive buscando pruebas de infidelidades aún cuando nada indique que algo de eso esté ocurriendo.
Alguien con celos enfemizos piensa todo el tiempo que está siendo engañado, que se burlan de él, que toda la gente cercana a su pareja es complice del supuesto engaño por lo tanto son considerados enemigos.

Somete a su pareja a continuos interrogatorios, lo llama todo el tiempo para controlar donde está, lo espía, persigue y es capaz de tener reacciones violentas si cree que le mienten o encuentra situaciones que considera sospechosas.
Los celos enfermizos terminan destruyendo la pareja ya que que en este tipo de relación uno se sentirá acorralado y el otro vivirá desesperado viendo engaños continuamente.
En algunas ocasiones este tipo de celos son altamente peligrosos y muchas veces terminan en actos de violencia o en tragedias irreparables.
Los celos enfermizos son patológicos y generalmente detrás de ellos puede haber muchas causas, algunas pueden ser inseguridad o autoestima baja pero también pueden haber otro tipo de problemas y siempre es necesario recurrir a la ayuda profesional para tratar de solucionarlos.

Los celos de posesión

Las personas posesivas consideran que todo lo vinculado a ellas es de su pertenencia, ya sean objetos materiales o personas y quisieran poder ponerles un sello para que todo el mundo las identifique como de su propiedad.
En estos casos se sienten celos de los propios amigos, no se tolera que se relacionen con otras personas, consideran una traición a la amistad si se reúnen sin avisarle o sucede algo que no le informaron primero.
Con la pareja ocure lo mismo, los celos no son precisamente por temor a perder el amor, sino que al considerar al otro como una propiedad no conciben que pueda haber una parte de su vida en la cual no participen.
Este tipo de celos tampoco es saludable ya que también se ejerce un control sobre el otro quien debe dar cuentas de todos sus pasos y no puede realizar ninguna actividad que no incluya a su pareja.
Esto genera una gran presión y puede terminar en la ruptura de la relación como forma de liberarse.

Celos o desconfianza

Es imposible hablar de los celos sin mencionar que en muchos casos estos son generados por motivos justificados.
Cuando previamente han ocurrido episodios de engaños o infidelidades y se perdió la confianza es lógico que se tengan celos o se dude de la pareja.
También pueden haber situaciones que lleven a los celos o a la desconfianza, por ejemplo cuando existen sospechas fundadas de que puede estar ocurriendo un engaño.
En esos casos lo celos son producto de circunstancias puntuales y no entran en ninguna de las categorías que describimos anteriormente.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hola, me gustaria contactarte, yo tambien soy psicologo...
escribeme
jsu.lizarraga@gmail.com

Psic. Cladia Elizabeth Solis dijo...

Bienvenido a tu Espacio con Claudia Elizabeth Solis, Agradezco tus comentarios, escribeme a elizabethsolis_a@hotmail.com